Hoy es Lunes 13 de abril del 2009.
_Un día después del domingo de resurrección_
Buenos días, ¿que tal?
La resurrección de Jesucristo, es uno de los aspectos de su vida, que como punta de lanza abre el tiempo y el espacio para establecer y demandar una verdadera actitud y aptitud de fe, en aquellos que creemos en El.
En el mundo hay mas de tres mil quinientos credos de de fe o religiones, donde solo la India cuenta con mas de tres mil y China y Japón, casi completan la lista. Sin embargo solo hay cuatro basadas en personas físicas: El Judaísmo, cuyo fundador indirecto es Abraham y complementada por el código de ley Mosaico, El Budismo, El Mahometismo y El Cristianismo.
Sin embargo: solo uno de los cuatros fundadores contaba con más de trescientas profecías antiguas, todas cumplidas en su vida y solo uno aseveró que se levantaría al tercer día de la tumba.
Lo cierto es que hay más datos históricos para enfatizar el hecho de la resurrección de Cristo, que los que tenemos para enfatizar el hecho del descubrimiento de América y la colonización del nuevo mundo. Solo la Enciclopedia Británica dedica más de 20,000 palabras en su artículo sobre Jesús, más de las dedicadas a Buda, Mahoma, Aristóteles y Cristóbal Colon Juntos.
Si bien hay tesis contrarias a la resurrección, ninguna de ellas tiene asidero de verdad o pueden ser comprobadas con evidencias circunstanciales:
Tesis 1: Cristo no estaba muerto cuando fue bajado de la cruz.
Refutación:
La ley del imperio romano, no le permitía a ningún criminal crucificado amanecer en la cruz, de modo que el soldado romano que usó la lanza y atravesó el costado de Jesús, lo hizo para asegurar el deceso de Jesús antes de que oscureciera.
La hemorragia causada por las heridas, dejo el cuerpo de Cristo sin sangre.
La deshidratación causada por más de 12 horas de martirio y camino con una cruz a cuesta.
Los testigos circunstanciales quienes vieron bajar el cuerpo muerto, entre ellos soldados, oficiales, Anas y Caifás. Estos últimos patrocinadores directos de la crucifixión de Jesús.
Tesis 2: El cuerpo no fue puesto en la tumba acordada.
Refutación:
José de Arimatea era un hombre credo y probo seguidor de Jesús, El no se iba a arriesgar a poner el cuerpo en otra tumba, para dar el pie forzado a sus antagonistas de acusarlo de ladrón de cuerpos y menos de una persona que había asegurado que resucitaría al tercer día.
Las Marías que fueron el primer día de la semana, no se dirigieron a otro lugar más que al lugar donde habían visto poner el cuerpo de Jesús.
Tesis 3: El cuerpo fue robado.
Refutación:
La ubicación de la tumba estaba en una cuesta, y una gran roca fue rodada hasta la entrada. No existía la tecnología ni las herramientas para mover rápidamente la roca, sin que nadie se percatara.
El imperio había puesto, por insistencia de Anas y Caifás dos soldados a custodiar la tumba. Ellos conocían las consecuencias si descuidaban sus puestos. El imperio era implacable. Recordemos los azotes del mismo Jesús. ¡Imagina que le harían a unos soldados que descuidaran sus puestos!
¿Quien robaría el cuerpo? Pedro, el mas atrevido de todos acababa de negarlo por cobardía y miedo a lo que le pudiera pasar. Judas, el que tenia aptitud de sedicioso y ladrón, ya se había suicidado. Las mujeres, si bien devotas a Jesús, en el momento histórico de este evento, era impensable para ellas emprender tal empresa. Natanael, tan comedido e íntegro (sin engaño) no osaría intentarlo. Tomas, ni creía muy bien en Jesús. Los fariseos y saduceos, para evitar el robo, por otros del mismo para luego asegurar la resurrección, no eran tan torpes para mover el cuerpo de alguien tan controversial y que había asegurado que resucitaría al tercer día. ¿Quien robaría el cuerpo?
Tesis 4: No era Cristo en la Cruz.
Refutación:
Todos vieron el proceso denominado la vía dolorosa, todos vieron a Jesús.
Jesús era muy conocido, sobre todo por los fariseos, primeros interesados en su ejecución.
Estoy seguro que Anas y Caifás, se aseguraron por cualquier medio de que el individuo en cuestión terminara en la cruz.
Wilbur M. Smith ha dicho: “Si nuestro Señor dijo, frecuentemente, con gran claridad y detalle, que después de que El subiera a Jerusalén, seria muerto, pero que en el tercer día se levantaría de la tumba, y esta predicción resulto ser cierta, entonces siempre me ha parecido a mi que todo lo demás que nuestro Señor dijo es cierto.”
Conclusión:
Lo que hace a la resurrección un elemento de importancia suprema, es precisamente su cumplimiento en la vida de Jesús. De modo que si la resurrección fue un hecho real, todo lo demás concerniente a Cristo, también lo es. Si alguien lograra quitar la resurrección del parnaso de la fe cristiana, también lograría erradicar todo lo relacionado con Cristo. Tendríamos, entonces que otorgarle todos los premios habidos y por haber, como resultado de su investigación y derrocamiento de una verdad hasta ahora inamovible desde el mismo momento de su establecimiento en la historia.
Freddie Johnson C. es pastor de la Iglesia del Nuevo Testamento, productor y conductor de Muro de Fuego, La Romana.
Libro consultado: Evidencia que exige un veredicto, por Josh McDowell.
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